Papito:
Aunque la distancia nos separe en este día tan especial, quiero que sepas que te tenemos presente en cada uno de nuestros pensamientos. Te extrañamos mucho y nos encantaría poder darte un fuerte abrazo en persona, pero la distancia no puede apagar el amor que siento por ti.
Eres mi héroe, mi guía y mi mejor amigo. Desde pequeña me has enseñado valores importantes, me has apoyado en mis sueños y me has dado todo tu amor incondicional. Gracias a ti, me he convertido en la persona que soy hoy.
Te agradezco por todos los sacrificios que has hecho por nosotros. Siempre has estado ahí para darnos una mano, para escucharnos y para aconsejarnos. Eres mi pilar fundamental, y sé que siempre podremos contar contigo para lo que sea.
Sé que la distancia a veces es difícil, pero me reconforta saber que estamos conectados por un amor que no conoce fronteras.
En este Día del Padre, queremos decirte que te amamos con todo nuestro corazón. Eres el mejor padre del mundo y estamos muy afortunados de tenerte en nuestra vida. Espero que pronto podamos estar juntos de nuevo y celebrar como se debe.
¡Feliz Día del Padre, papidingo!